Señores Senadores, Señoras Senadoras:
Estamos asistiendo pese a todos los tropiezos, a un momento histórico del país. El Acuerdo alcanzado entre las FARC y el gobierno nacional, es un paso trascendental en la construcción de una paz definitiva, firme y duradera, tras 50 años de conflicto armado que ha dejado millones de víctimas y grandes secuelas y heridas a la sociedad colombiana en su conjunto.
El Acuerdo, aunque no es el ideal, ni perfecto, es el resultado de una construcción política incluyente, que involucro incluso a los colombianos y colombianas que se opusieron a él.
Es un Acuerdo que contempla importantes compromisos en materia de Derechos Humanos que permitirán avances en participación política, desigualdad rural, búsqueda de la verdad, superación de la impunidad y desmonte de las estructuras paramilitares.
Como plataforma de incidencia en materia de Derechos Humanos, valoramos especialmente los diferentes mecanismos creados en el marco del Sistema Integral de Verdad, Justicia, Reparación y Garantías de No Repetición quienes deberán asumir de manera efectiva y desde una perspectiva humanitaria y restauradora de derechos, las violaciones masivas y sistemáticas de DDHH y las prácticas de victimización generalizada cometidas por todos los actores sean estos combatientes, civiles o funcionarios públicos a partir de la verdad. Una verdad que determine responsabilidades de los máximos responsables, repare y reconcilie una sociedad, socialmente rota, fragmentada y polarizada en torno al conflicto y en torno a cómo superarlo.
Asistimos a este momento en circunstancias muy difíciles de persecución y agresión a líderes/as sociales y defensores/as de DD.HH que no harán que desfallezcamos en nuestro compromiso firme con la construcción de la paz y la implementación del Acuerdo. Consideramos el cese bilateral del fuego uno de los acumulados que ya nos ha ido dejando este proceso y que solamente con su ratificación e implementación será definitivo.
Senadores y Senadoras:
Estamos en sus manos. Esperamos de ustedes la expresión contundente de su compromiso con los anhelos de paz de los ciudadanos y ciudadanas de este país, con las regiones más azotadas por el conflicto y especialmente con las víctimas, dejando de lado vanidades, intereses políticos y partidistas.
Nuestro llamado es a refrendar el Acuerdo hoy. Esperamos también de ustedes una actitud afirmativa y constructiva para su pronta implementación, manteniendo la esencia de lo pactado y respetando la centralidad de los derechos de las víctimas a la verdad, la justicia, la reparación y las garantías de no repetición.
Insistimos de nuevo en que lo que tienen en sus manos más que 310 páginas, es la posibilidad histórica de avanzar hacia la superación definitiva del conflicto armado y el fortalecimiento de la democracia, esperamos que su compromiso este a la altura de este desafío y cuenten con nosotros para las tareas de implementación del Acuerdo.
Ver acá la intervención en PDF: intervencion-cceeu-ratificacion-acuerdo
estoy de acuerdo que comience ya la implementación no dejen dilatar estos acuerdos para el otro año, o dino comenzaremos otra vez la guerra